La creación de empresas en Colombia es positiva. Según la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras), durante el 2021 aumentó 10,6% frente al 2020. A pesar de esto no todas logran sobrevivir; se estima que el 75% de las empresas dejan de existir a los dos años de haber iniciado su operación, de acuerdo con la firma New Ventures.
Estas cifras demuestran una realidad que impacta, pero que, sobre todo, contrasta con aquellas compañías que superan las estadísticas y sobreviven en el mercado. Una de ellas es nariñense, ha crecido junto con los avances tecnológicos de la sociedad y, más aún, los ha sabido leer e involucrar en el negocio para continuar vigentes durante más de un siglo: se trata de Casa Mettler.
Esta icónica marca de la región ha sido parte de cuatro o cinco generaciones desde su llegada al país en 1904 y sigue haciendo historia. En un principio, la compañía comercializaba todo tipo de mercancías que para la época eran importadas como, por ejemplo, paños ingleses, muebles, vehículos automotores, motocicletas, diferentes maquinarias y relojes suizos.
118 años después, la oferta del negocio se ha especializado, pero su objetivo sigue siendo el mismo: brindar productos y servicios de calidad a todos sus clientes.
Frente a esto Roland Helfer, gerente, explica que el reto más grande que ha tenido la compañía a lo largo de estos años ha sido sobrevivir “y esto lo hemos logrado desde nuestra oferta de valor porque garantizamos la calidad de lo que vendemos, y eso es lo que nos ha dado la larga vida”.
Adicionalmente, y como factor fundamental, Helfer indica que para lograrlo se han “adaptado a los tiempos cambiantes”, en los que sus clientes y proveedores han desempeñado un papel decisivo debido a que el contacto con ellos les ha permitido entender sus necesidades en un entorno tan dinámico como es el del comercio.
Dentro de los cambios más grandes que ha realizado Casa Mettler en respuesta a la creciente competencia virtual, está la adopción de plataformas digitales, como redes sociales y sitio web, que además de permitirle fidelizar a su comunidad y romper fronteras, también le ha servido de vitrina ante consumidores y proveedores.
Asimismo, la compañía está en proceso de ser responsablemente ecológica con el propósito de impactar de forma positiva a los futuros nariñenses, por lo cual hizo una inversión considerable para implementar iluminación solar en gran parte de su infraestructura y una huerta en la terraza administrada y cuidada por sus trabajadores.
Saber leer el entorno donde opera el negocio, sumado a adaptarse adecuadamente a los cambios para sobrevivir, sin perder su esencia, es para esta compañía la bandera de su éxito y lo que le ha permitido ser la compañía más antigua del sur de Colombia y una de las principales generadoras de empleo en la región.